Anoche me desvelé y a eso de las dos de la mañana ya era consciente de la trascendencia de las detenciones que salieron a la luz a eso de las once. A causa del atontamiento por la falta de horas de sueño, hoy no he podido seguir con mucha atención los medios de comunicación pero me han llamado la atención dos cosas; una la escuche en la radio y era la voz de los etarras detenidos gritando gora eta askatuta, y otra, la imagen de arriba de la cara de odio de un fanático, el que a golpe de detonador en la T4, se cargó la última mejor esperanza de que terminara pronto la violencia etarra. ¡Cuánta ira muestra ese gesto! Están acabados pero la degeneración continuará.
1 comentario:
¡¡Malditas sean las banderas!!
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