lunes, 16 de junio de 2008

Verdades no evidentes


Este domingo lo he dedicado como suele ser habitual al cine. En esta ocasión he revisado tres películas ya vistas. El cielo protector, Monster Ball y La vida de David Gale.

Solo me voy a detener en la última, obra de Alan Parker, como The Commitmens o la fabulosa, Arde Mississippi. Destaco la crítica de Mateo Sancho en la que afirma:

Valiéndose de una súbita articulación de todas las desperdigadas piezas lanzadas con desdén en los minutos anteriores, el guión de Charles Randolph consigue milagrosamente la transformación de un filme fallido en un mecanismo de engranaje preciso que deja boquiabierto al espectador y consigue su sorpresa cuando ya había tirado la toalla.
Por mi parte, destacar la escena del comienzo en la que David Gale habla a sus estudiantes del deseo y de Lacan. Para quien lo desconozca, la peli va de la pena de muerte y a pesar de que hemos visto unas cuantas de esta temática (me acuerdo ahora de la de Susan Sarandon y Sean Pean), ésta es bajo mi punto de vista, la más controvertida y sorprendente. Atentos al subtítutlo: el crimen es evidente, la verdad no.
Y por cierto ¡cómo me gusta Kevin Spacey!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo también la vi por segunda vez!! Me encanta la peli. Y el Kevin que se sale (todavía recuerdo la maravillosa KPAX!!)

La desaparición de las luciérnagas. Sobre P.P. Pasolini.